Tendida sobre la cama, con la luz apagada,
y los ojos abiertos:
voy pensando,
recordando
nuestro caminar por la
vida;
cogidos siempre de la
mano, sonriendo siempre,
sonriendo a la vida, contentos
con nuestro trabajo.
Ahora con el paso del
tiempo, ahora ya no estas aqui, pero estoy segura que sigues a mi lado, y me
vas indicando el camino a seguir. Tú eras valiente,
yo, junto a ti, pensando,
siempre pensando donde ir,
donde colgar tus
cuadros para que todos los pudieran: ver,
criticar o adular,
según los ojos que los miraran, los gustos de cada uno.
Me sentía orgullosa de
poder presentar todas tus obras
en distintos lugares
del mundo que nos lo pedían,
ahora, seguiré otra
vez haciendo lo mismo
porque mientras las
pueda ver se que estas junto a mí.
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